EL PECADO ORIGINAL (GN 3,1-6) (Y II)

UNA OBRA EJEMPLAR

Pecado y expulsión del jardín del Edén (1509). Miguel Ángel Buonarroti. Capilla Sixtina (Vaticano, Roma, Italia).

ESTUDIO ICONOGRÁFICO

Se trata de uno de los frescos pintados por Miguel Ángel en la bóveda de la Capilla Sixtina. Estos frescos representan la visión más perfecta de la idea neoplatónica, que afirmaba que la belleza de la figura humana tiene un carácter divino. El carácter profundamente religioso de Miguel Ángel y su genialidad le acarrearon fuertes críticas por el juego que hacía de las técnicas clásicas.

El sexto fresco de la Capilla Sixtina está dividido en dos partes por el árbol del bien y del mal: antes y después del pecado. Mide 280 cm × 570 cm .

Adán aquí es rubio, maduro y musculoso. Está estirando el brazo para coger el fruto del árbol. La fisonomía de Adán es gigantesca, casi monstruosa. Su rostro y su pelo también son diferentes del Adán de la expulsión del Edén.

La figura de Eva en también madura, musculosa y varonil (nada femenina) a diferencia de la imagen de la creación. El cuerpo de Eva está retorcido, como el de Satanás. Eva está recostada; parece inactiva, pero alarga el brazo para recoger el fruto.

Resulta interesante comparar los rostros y las actitudes de Adán y Eva antes y después de comer el fruto del árbol. Las caras que vemos en Adán y Eva son terribles. Los dos parecen haber envejecido y su rostro se deforma y se arruga de la tristeza. Eva parece una anciana. Al comer del fruto prohibido hallaron penoso el estar desnudos, así que sus poses demuestran pudor también. Los dos se cubren del ángel y de ellos mismos.

Satanás tiene apariencia femenina; es maduro, está desnudo; su cuerpo es grande y musculoso; sus piernas se asientan en la tierra. El ángel tiene apariencia ambigua; es joven, está vestido, las líneas de su cuerpo son delicadas; sus piernas vienen del cielo.

El fondo de las dos escenas. En la caída aparecen muchas piedras y un árbol seco. El cielo no tiene nubes y parece ser por la mañana. En la expulsión es un terreno desértico, sin nada de vegetación. El cielo es azulado y parece ser un atardecer.