La lectio divina (o lectura orante de la Palabra), con sus pasos (lectio, meditatio, oratio y contemplatio), facilita la oración individual o comunitaria. Aquí presentamos varios ejemplos de lectio divina desarrollados por la Fundación Ramón Pané y otros ejemplos sacados del Proyecto Nazaret.

La lectio divina (lectura orante de la Biblia) es una forma de oración y reflexión que se desarrolla a partir de un texto bíblico y que cuenta con una gran tradición en la Iglesia. Tiene carácter tanto individual como grupal. Desarrolla una metodología propia con cuatro pasos: lectio (lectura), meditatio (meditación), oratio (oración) y contemplatio (contemplación). En esta sección se ofrecen varios textos bíblicos tanto del Antiguo como del Nuevo Testamento. Algunos de los textos pertenecen a los materiales catequéticos del Proyecto Nazaret. Otros textos los comparte la Fundación Ramón Pané. En todos ellos se ofrece el siguiente esquema: ambientación, lectio (leo el texto), meditatio (me dejo leer por el texto), oratio (hablo con Dios a partir del texto) y actio (me comprometo desde el mensaje de fe del texto). Con esta sección queremos enriquecer las propuestas de oración para la pastoral, ofreciendo una forma de oración presente desde los inicios del cristianismo y adaptada a los tiempos actuales.

«Haced esto en memoria mía» Lucas 22, 14-20

En nuestra sociedad están en desuso conceptos como servicio, esfuerzo, sacrificio, y mucho más si están en relación no con el propio provecho, sino orientados hacia los otros. La vida de Jesús tiene mucho que decirnos a los cristianos al respecto.

«Haced esto en memoria mía» Lucas 22, 14-20

En nuestra sociedad están en desuso conceptos como servicio, esfuerzo, sacrificio, y mucho más si están en relación no con el propio provecho, sino orientados hacia los otros. La vida de Jesús tiene mucho que decirnos a los cristianos al respecto.

«“Creo, Señor”, y se postró ante él» Juan 9,1-41

El apóstol Juan, en su evangelio, muestra a Jesús en varias ocasiones asediado por los fariseos que están ciegamente unidos y apegados a «la letra» de la Ley. En este caso, se trata de un milagro de Jesús.

«“Creo, Señor”, y se postró ante él» Juan 9,1-41

El apóstol Juan, en su evangelio, muestra a Jesús en varias ocasiones asediado por los fariseos que están ciegamente unidos y apegados a «la letra» de la Ley. En este caso, se trata de un milagro de Jesús.

«Bienaventurados» Mateo 5,1-12

Cuando Jesús proclama las Bienaventuranzas, está elogiando a sus discípulos y discípulas. Lo hace para exhortarles públicamente a continuar viviendo con radicalidad las exigencias del reinado de Dios.

«Bienaventurados» Mateo 5,1-12

Cuando Jesús proclama las Bienaventuranzas, está elogiando a sus discípulos y discípulas. Lo hace para exhortarles públicamente a continuar viviendo con radicalidad las exigencias del reinado de Dios.